En la oscuridad, en la luz del día
en el silencio perfecto mientras llueve a cántaros
sobre el nivel del mar, sobre el techo del mundo
años luz distante de mí de los momentos, un segundo
y así infinitamente perdiendo la cuenta
Mantén el beso
más allá del error del tiempo
haz algo eterno con él
no dejes caer ni un solo fragmento
como polvo en el suelo
no quites los labios ni un solo segundo
y no dejes que el ruido de fondo te distraiga
porque al final cada vez
es el amor que nos salva de la herida del mundo
Y siente sólo el corazón y el mal ya no existe
y ya no hay más dolor, sólo yo, sólo tú
este silencio sabe a mil palabras
y yo estaría aquí escuchándote durante horas
por años, un solo segundo
Y si me miras me doy cuenta
que al final cada vez
es sólo el amor que nos salva de la herida del mundo
Protégelo hasta las raíces
de pasos indecisos y temporales repentinos
de los momentos de crisis y las bromas infelices
de esas personas que se hacen pasar por amigos, de la envidia
de los demás con juicios ignorantes
de los fragmentos locos que llegan de todas partes
Mantén el beso
más allá del error del tiempo
haz algo eterno con él
no dejes caer
ni un solo fragmento
como polvo en el suelo
no quites los labios ni un solo segundo
y no dejes que el ruido de fondo te distraiga
porque al final cada vez
es el amor que nos salva de la herida del mundo
Y siente sólo el corazón y el mal ya no existe
y ya no hay más dolor, sólo yo, sólo tú
este silencio sabe a mil palabras
y yo estaría aquí escuchándote durante horas
por años, un solo segundo
Y si me miras me doy cuenta
que al final cada vez
es sólo el amor que nos salva de la herida del mundo
Y del transcurrir de los días que no valen un recuerdo
Mantén el beso y no lo dejes ni por un segundo
Y cuanto más me quedo aquí mirándote, más me doy cuenta
es el amor que nos salva de la herida del mundo