Con las flores que riega tu jardinero
voy a hacerme la cinta de mi sombrero.
Con las flores que nacen en tu ventana
voy a hacerme la hebilla de mi canana.
Y después te pediré besar tu boca,
y verás que, sin querer, te vuelves loca.
Besos y flores, flores y besos.
Yo sólo vivo sólo por eso:
Por un amor que te daré de noche y día.
Sin descansar te besaré, sentrañas mías.
Besos y flores, flores y besos.
Yo sólo vivo sólo por eso.
En el monte, cazando, sobre la nieve,
yo te llamo bajito por ver si vienes.
Y galopa mi potro por las montañas
para verme herío por tus pestañas.
Y después te llevaré con mi caballo
a poner mi corazón sobre tus labios.