Perdóname, padre mío, porque he pecado
Absuélveme por todos mis pecados
Incluso en los días en los que te había olvidado
siempre estuviste en mi vida.
En todos los caminos por los que anduve, de hecho,
fuiste para mí una luz a mis pies
Estuve ciego, no veía más allá
de lo que miraban mis ojos.
Rey de reyes, gracias por la vida
por la alegría, el llanto, la risa
incluso cuando es difícil, incluso entonces, Di-s,
nunca estás lejos.
Aun cuando me había ido y mi camino estaba oscuro
he confiado en ti, Di-s mío.
[Gracias] Por mi segunda mitad, por mi niño y niña.
Gracias también por la alegría sin fin.
Gracias por las fiestas,
por el Shabat que se guarda
Cada día que pasa en mi camino al Paraíso
te he puesto frente a mis ojos.
Rey de reyes…