Los reyes se reunen allí donde florece la fresa,
Adornando sus coronas con el pudor del rocío limpio.
La ortiga se ha enfadado, pero, al pensarlo, se ha marchitado,
Duérmete rápido, mi único hijo, mi hijo de la luna.
Las reinas han adornado sus trenzas rubias con flores,
En sus ojos se reflejan el lúpulo y la saña de la primavera.
No mires - estos juegos tontos son para los adultos de la sangre real,
Duérmete rápido, mi único hijo, mi hijo de la luna.
Hijo de la luna,
Estás en tu cuna de luna,
Hijo de la luna,
Rey de las estrellas.
Para ti suenan
Las cuerdas que apenas se oyen,
Hijo de la luna,
¡Magia mía!
Las sombras magníficas saltarán sobre la hoguera ardiente,
Y a los invitados de la luna llena la ropa les parecerá demasiado apretada.
La fresa desaparecerá, las coronas de flores fluirán con la corriente...
Duérmete rápido, mi único hijo, mi hijo de la luna....