Tú preparando tan solo un café,
con la mirada en el suelo.
yo acostumbrándome a hacer el papel,
de como que nos queremos.
Claro, más claro que el agua.
Yo recogiendo la orilla del mar,
bajo la alfombra del tiempo.
Tú descambiando los versos,
y la letra de nuestra canción.
Claro, más claro que el agua,
igual que los gatos no ladran.
No vamos a llorar,
vamos a olvidar sin lagrimas,
lo sueños que disfrazan la verdad,
camino de la buena suerte.
Vamos a lanzar,
las muñecas tristes al desván,
y en esta maleta por cerrar,
guardaremos nuestra suerte.
Claro, más claro que el agua,
igual que los gatos no ladran.
Lo que atraviesa la respiración,
entre tu boca y la mía,
el eco de tus zapatos me cuentan,
que empieza la despedida.
Que está más claro que el agua,
nos aprendimos la trampa.
No vamos a llorar,
vamos a olvidar sin lagrimas,
lo sueños que disfrazan la verdad,
camino de la buena suerte.
Vamos a lanzar,
las muñecas tristes al desván,
y en esta maleta por cerrar,
guardaremos nuestra suerte.
Claro, más claro que el agua,
igual que los gatos no ladran.