Ay...
es tanto que caminas
y no sientes dolor en los pies
te sigo ya desde hace un poco
mira
con dos ojos negros y cansados
y no me ves y pasas delante
yo te sigo aún por un poco
¿quién lo hubiera dicho antes, que yo
un día iría detrás de ti?
como cuando un hombre busca a Dios
esta carrera
no tiene sentido
si el sentido ya lo he perdido
detrás de ti
quisiera odiarte un poco
sin, sin al menos amarte
y quisiera amarte entonces
sin, sin al menos conocerte
y mientras Londres se quema
a nuestro rededor
Ay...
mientras Londres se quema matas
cada mirada sobre la que caes
yo te observo ya desde hace un poco
y te pierdes
en los míos, tus propios ojos cansados
y me ilusionas y pasas delante
tal vez espero un otro poco
¿quién lo hubiera dicho antes, que yo
un día perdería el tiempo detrás de ti?
como cuando un hombre busca a Dios
no lo encuentra
y más enloquece
yo enloquezco
si me quedo ahora
sin ti
quisiera odiarte un poco
sin, sin al menos amarte
y quisiera amarte entonces
sin, sin al menos conocerte
y como cuando un hombre pierde a Dios
yo no quiero
entender en fondo que no estás
y abrazo fuerte mi sueño
y te dejo
terminar los días tus días
en mi cabeza junto a mí
Ay...
Londres se quema y ¿tú qué dices?
¿si te detengo qué dices?
y ya no estás más...
Calles que he perdido
dentro tus ojos
negros de fango
cansados de todo
y de hecho de nada
ahora las busco
en cada palabra
dicha por error
de quien no sabe bien
cómo pasar a otro destino
vivo disperso
en los subterráneos
de estos días tuyos
no queda más nada
de tus lamentos
sólo el recuerdo
de algún instante
cercanos a deber
alrededor de la barriga
como un cinturón
para no olvidar
el tiempo que huye
hacia tus días
que no son nada
ahora que también yo
no tengo dirección
y vago en la oscuridad
no tengo destino
y dame tú
una nueva dirección
donde encontrarme
colgado a un espejo
en cada regreso
un nuevo retrato
colgado a un espejo
mi retrato...