Son de una estación que se va de viaje
Con el viento del tiempo como eternal maleta
Son de una estación que ya ni siquiera tiene apellido
Y que no cesa de fruncir1 nos la frente
Son de una estación que pasa por la casa
Sin fruta y sin sol con en el horizonte
El humo de las nubes que se estirazan a lo lejo
Y que nunca acaba de tendernos la mano
Son esa música que de repente resurge
En el surco de un disco el espacio de una mañana
Y si sonríen a veces bajo un rayo de inviernos
Es porque han vencido nuestras lagrimas2 efímeras
Entonces el corazón resonando3 vienen riendo
Los brazos cargados de flores con pétalos de plata
Entonces el corazón lleno de lagrimas, les abro la puerta
Y cierro los ojos bajo sus brazos que me llevan
Son como la ola del alba4
Con bancos de arena para un recorrido eternal
Son las almejas y las playas sin apellidos
Orillas fiel donde mueren los peces
Y si a veces lloran bajo un rayo de luna
Es porque han perdido en un desierto de niebla
Esa cara de niño que tendía los brazos
Esa mujer de ante que ya no está aquí
Las esperan tal vez detrás de la cortina
Y se quedan mucho tiempo, pero se seña5 ya pronto
Son de una estación que no quiere morir
Y que no acaba de contar nuestros suspiros
Son la sombra del otro que ya no está aquí
Y siguen el cortejo siempre a paso de gato
Y cuando los olvidamos, no nos olvidan
No paran de hablarnos susurrando
1. arrugar 2. penas3. latiendo4. en la punta del día5. señir?