Me gustaría tanto quebrar vuestros sueños
Destruirlos a grandes carcajadas
Pisotearos como un toro
Como un toro enfurecido
Un día, iré a casar mis vicios
Con aquellos de los dioses, reyes de malicias
Para mataros a puñaladas
A puñaladas apasionadas
Todo sin vuestro permiso
Sin tampoco pediros perdón
Sobrestimé vuestros gritos
Subestimé mis ansias
Sobrestimé mis fallos
Subestimé el decorado
Y desde entonces los remordimientos vienen a devorar mi cuerpo
Hubiera preferido caminar
Por caminos ya asfaltados
Hubiera preferido jugar
A un juego en el que pudiera ganar
Y siempre los remordimientos vienen a devorar mi cuerpo
Por más que adore detestaros
Por más que adore lapidaros
Por más que adore el olor de vuestros cuerpos medio quemados
Siempre y todavía, los remordimientos vienen a devorar mi cuerpo
Me iré solo a mi casa dorada
Para allí lamer la corteza de los manzanos
Olvidar todos aquellos momentos pasados
De querer arrancaros una sonrisa pagada demasiado caro
Y puede que ese día los remordimientos dejen de devorar mi cuerpo