Hablabas a la luna, jugabas con las flores
tenías la edad que no trae dolores
y el viento era un mago, el rocío una diosa
en el bosque encantado de cada idea tuya
en el bosque encantado de cada idea tuya
Y vino el invierno que mata el color
y un Papá Noel que hablaba de amor
y de oro y de plata brillaban los regalos
pero sus ojos eran fríos y no eran buenos
pero sus ojos eran fríos y no eran buenos
Cubrió tus hombros de plata y de lana
entrelazó un collar de perlas y esmeraldas
y mientras encantada le estabas mirando
desde los pies hasta los cabellos te quiso besar
desde los pies hasta los cabellos te quiso besar
Y ahora que todos te llaman diosa
ya desvaneció el encanto de cada idea tuya
pero aún a la luna quisieras contar
la historia de una flor marchita por Navidad
la historia de una flor marchita por Navidad