Anoche tuve el sueño más extraño,
que he soñado jamás.
Soñé que el mundo había llegado a un acuerdo,
para ponerle a la guerra un fin.
Soñé que vi una habitación poderosa;
estaba llena de hombres,
y el papel que firmaban decía
que jamás lucharían de nuevo.
Y cuando todo estaba firmado,
y se hicieron un millón de copias,
se tomaron de las manos y se reverenciaron,
y se rezaron agradecidas oraciones,
y la gente de la calle
bailaba de aquí a allá,
y armas, espadas y uniformes
se esparcían por el suelo.
Anoche tuve el sueño más extraño,
que he soñado jamás.
Soñé que el mundo había llegado a un acuerdo,
para ponerle a la guerra un fin.