Te vi ayer en la tarde
que caminabas con prisa.
Me habría gustado darte una caricia y luego
en esta primavera
que el sol aún espera
no logré decirte
siquiera "¿Cómo estás?"
Pero cuántas veces ya las ganas de
llamarte, sabes
y de volver a oír tu voz
para después convencerme que así es inútil,
y ahogarme de nuevo
entre mis escalofríos.
Hey, tú dime si
existe un modo
de que regresemos tú y yo
o si en cambio
es mejor que
nos dejemos perder
y marcharnos lejos,
ahora lejos
para aprender a vivir.
Y tú te quedas ahí
inmóvil pensando
si tienes ganas de escapar
o de quedarte aquí.
Cadena que te ata
y luego apenas y se rompe.
Buscamos ese abrazo
que nunca se cierra.
Sería sencillo
y en cambio no lo es,
entender realmente
si el amor es de verdad.
En cada laberinto
sólo hay una sola salida.
Pero ahora, de nuevo y como siempre
nadie sabe dónde está.
Hey, tú dime si
existe un modo
de que regresemos tú y yo
o si en cambio
es mejor que
nos dejemos perder
y marcharnos lejos,
ahora lejos
para aprender a vivir.
Porque somos tan sensibles
y estamos aquí para perseguirnos
hasta que después,
rozándonos, escapemos de nosotros.
Y yo me pregunto lo que
tú te preguntas.
¿Ya terminó o en cambio todavía
existe una emoción?
Hey, tú dime si
existe un modo
de que regresemos tú y yo
o si en cambio
es mejor que
nos dejemos perder
y marcharnos lejos,
ahora lejos
para aprender a vivir.
Porque somos tan sensibles
y estamos aquí para perseguirnos
hasta que después,
rozándonos, escapemos de nosotros.