En una fuente clara
una tórtola coqueta se miraba,
su cola de abanico
la peinaba a cada instante con su pico.
"Esa soy yo" se decía
y por no enturbiar el agua no bebía
"no quiero que el agua clara se vuelva cieno
espero hasta que llegue mi compañero"
pero no llegó, pero no llegó, pero no llegó
y por no beber se murió de sed sin llegar su amor.
Tórtola presumida haber bebido
hoy estarías viva junto a tu nido
como dejaste solo a tu compañero
otras le dan su cama para tenerlo
Sus hijos no nacieron
porque el nido que forjó se lo robaron
murió mirando el agua
y el que muere es el que pierde esta bien claro.
Su compañero vivía
con la una y con la otra cada día.
En vez de mirarte tanto sobre la fuente
haberte bebido el agua tan transparente
el que pierde mas, el que pierde mas, el que pierde mas
es aquel que da su volcán de amor y después se va.