Oh gaviota voladora, que vuela sobre el mar,
y al paso del viento del mar afuera, vas volando hasta llegar
a la playa soleada, playa de dulces recuerdos
donde día y noche ha estado, la niña de mis amores.
Cuando la veas sola, a lado de la quieta onda,
dale un beso, que le envío más ferviente
dile que siento la dulce melancolía
y que pienso en ella en cada momento.
Oh, si igual que tu gaviota el mar pudiera travesar
hasta llegar a la playa donde tan dulce es recordar
y viera la oscura imagen en su bello despertar
de la niña que entre sueños es tan agradable de acariciar.
Cuando la veas sola, a lado de la quieta onda,
dale un beso, que le envío más ferviente
dile que siento la dulce melancolía
y que pienso en ella en cada momento.