Éramos veinte o treinta
bandoleros en una banda
todos vestidos de blanco
a la usanza de, Usted me oye,
todos vestidos de blanco
a la usanza de los comerciantes.
El primer robo
que hice en mi vida
es de haberle quitado
el monedero a un, Usted me oye,
es de haberle quitado
el monedero a un cura.
Entré en su habitación
Dios mío, que grande era,
Encontré aquí mil ecus
puse la mano, Usted me oye,
Encontré aquí mil ecus,
puse la mano encima.
Entré en otra,
¡Dios mío, que alta era!
De vestidos y abrigos
cargué tres, Usted me oye,
de vestidos y abrigos
Cargué tres carros.
Los traje para venderlos
en la feria de Holanda
Los vendí barato
Nada no me habían, Usted me oye,
los vendí barato
no me habían costado nada.
Estos Señores de Grenoble
con sus largos vestidos
y sus gorros cuadrados
pronto, Usted me oye,
y sus gorros cuadrados
pronto me juzgaron.
Me juzgaron a ahorcar
qué difícil es de oír
a ahorcar y estrangular
en la plaza, Usted me oye,
a ahorcar y estrangular
en la plaza del mercado.
Subido en la horca
miré Francia
vi a mis compañeros
a la sombra de un arbusto, Usted me oye
vi a mis compañeros
a la sombra de un arbusto.
Compañeros de miseria
vayan a decir a mi madre
que no me verá nunca más
Soy un niño, Usted me oye
Que no me verá nunca más
soy un niño perdido.