Fija tu punto de partida
desde allí comenzarás;
será tu rumbo de salida
porque a tu meta te llevará.
Tu entrenamiento será tu fortaleza,
tu experiencia una oportunidad,
no prestes atención a tus adversarios
sólo se burlan de tu capacidad.
Tus obstáculos no son impedimento
ni los tropiezos un sufrimiento,
continúa siempre en el camino
eso te llevará a tu destino.
No pienses que tendrás la medalla
si piensas en no querer correr,
no busques atajos ni vías fáciles
o lugares que no puedas recorrer.
Si en la meta sigues luchando
la carrera estarás ganando,
¡avanza! ya lo estás logrando
porque tu meta te está esperando.