Así que eres completamente nuevo.
Acabas de zarpar.
Tu viaje sigue siendo un cuento de hadas.
Es divertido y entretenido cuando te derrumbas.
Tus padres te levantan del suelo.
Y te dicen que tú eres el rey del mundo.
Es sólo la juventud en el Titanic
cuando los días duran por siempre
y no necesitas nada mejor
que la verdad; no tiene mano dura.
Pasas tus tardes simplemente corriendo
pues todavía no sabes lo que está por llegar.
Eso es sólo la juventud.