Aun retumba las palabras, que conducen al paraíso.
Deja que alguien detenga, ese sentimiento.
Como un alma de plomo, y un cuerpo de cristal.
Como palabras de plomo, destrozan el cuerpo.
A dónde iré, cuando reine la oscuridad.
La sombra de tu fantasma, me roba el sueño.
Es como correr, y ser detenido ante las puertas que conducen al cielo.
Quien sabe, donde se esconde el tesoro que esta en nosotros.
Aquel que cura nuestra heridas, y revela los secretos.
Solo unos pocos saben, el lugar correcto donde buscar.
Solo unos pocos saben, como ver más allá de sí mismos.
A dónde iré, cuando reine la oscuridad.
La sombra de tu fantasma, me roba el sueño.
Es como correr, y ser detenido ante las puertas que conducen al cielo.