A los Hermanos Fuentes y al Rico Moreira,
al Coco Brun y a Charquero, a don Gregorio y al Chilo,
a Riaño y a Moriño,
al Negro Bruno, a doña María y al Capincho Fernández,
y a toda esa gente que quiso un camino nuevo pa’ su pago,
pero que no precisa un camino nuevo pa’ llegar a mi memoria.
Miren que son pagos lindos,
los de la Quinta Sección:
las sierras son como madres ¡Cómo no!
y hasta el vientito es cantor.
Firme está la Isla Patrulla,
mojón de la tradición,
donde el sol por tomar mate ¡Cómo no!
dicen que es madrugador.
La gente no anda mostrando
así nomás su amistad;
tiene el afecto escondido ¡Cómo no!
como el agua del lugar.
Quiere mantener bien viva
la llama de su fogón,
y hasta la casa más pobre ¡Cómo no!
tiene su jardín en flor.
Y en las viejas arboledas
y por la calle mayor,
entretenido en recuerdos ¡Cómo no!
un aire antiguo quedó.
Patria chica, Isla Patrulla,
arisco rincón tenaz,
patria del sombrero aludo ¡Cómo no!
bien aludo echao p’atrás.
Patria chica, Isla Patrulla,
algún día he de volver,
pa’ hallar los viejos lugares
algún camino ha de haber.
Pa’ hallar los viejos lugares ¡Cómo no!
algún camino ha de haber.