Con un yunque al pecho
Mi cabeza en una Rueda*
Con voz de trueno
Me desconecto
¡Libre!
La ropa inflamable es abrochada.
No puede ser arrancada
Un cuarto cerrado, al cual odiar
Un espejo en el cuarto, al cual odiar
En el espejo miras, a quien odiar
Solo hay uno de nosotros, a quien odiar.
¡Libre!
Llegas para volver a unir las frágiles piezas de un plato.
Allí te quedas y de eso nunca te liberarás
¡Libre!
Cuando las hogueras arden
¡Libre!
Cuando los demonios llegan
A través de las puertas escapo, ando a tientas en la seguridad de la oscuridad
A través de la puerta sé que hay un camino más allá del camino del conocimiento.
Escrituras, infinitas; escrituras sin palabras
Escrituras, que están atadas
Escrituras, que tratan de zafarse
¡Libre!
Las hogueras arden
¡Libre!
Los demonios llegan