Por encima de cada pena te quiero decir,
cada miedo, cada infortunio, cada herida
cercano a lo peor, a esos males que casi no se quieren,
cada desesperación no requiere más que florecer.
Y si te preguntas y si te pierdes
y cómo hacer y cómo ser y por qué vivir,
basta, basta una mano, una mano tendida
y sobre un hombro
dos o tres palabras
que lleve una voz.
Cuesta poco hacerlo.
Juntos se puede, juntos se puede,
juntos nuestro coraje tiene que aumentar.
Juntos se puede, juntos se puede,
juntos nuestros corazones se tienen que encontrar.
No hay mal que cien años dure,
nunca se hace de noche sin clarear,
en corazón desgarrado un bello día nacerá,
en corazón cansado cualquier belleza nace y se va.
Dime si o no, dime esos indicios
y ¿dónde están?, ¿dónde están los brazos que pueden caer?
y del tú y del vosotros haremos un nosotros
y si tienes un sol y si tienes un sueño,
hagamos cadena de humanidad.
Juntos se puede, juntos se puede,
juntos nuestro coraje tiene que aumentar.
Juntos se puede, juntos se puede,
juntos nuestros corazones se tienen que encontrar.