Yo como un árbol desnudo sin ti,
ya sin hojas ni raíces.
Abandonada así.
Para renacer te necesito aquí.
No hay una cosa que no recuerde a nosotros
en esta casa ya perdida.
Mientras la nieve cae,
es casi Navidad y tú ya no estás.
Y me faltas, amor mío.
Tú me faltas como cuando busco a Dios
y en ausencia de ti,
yo te quisiera para decirte que
tú me faltas, amor mío.
El dolor es fuerte como un largo adiós
y la ausencia de ti
es un vacío dentro de mí.
Porque de nosotros ha quedado el alma,
cada pliegue, cada página.
Si cierro los ojos estás aquí,
tú que me abrazas de nuevo así.
Y nos veo estrechados en nuestro interior,
atadas para no desatarnos jamás.
En cada lágrima tú estarás
para nunca olvidarte.
Y me faltas, amor mío,
tanto, tanto que cada día también yo muero.
Necesito de ti,
tenerte aquí para decirte que
tú me faltas, amor mío.
El dolor es frío como un largo adiós
y en ausencia de ti,
el vacío está dentro de mí.
Tú me faltas, amor mío,
y me faltas como cuando busco a Dios.
Necesito de ti,
tenerte de nuevo aquí conmigo.
Y me faltas, amor mío,
tanto, tanto que quisiera seguirte yo también
y en ausencia de ti,
el vacío está dentro de mí.
Grito mi necesidad de ti
porque ya no hay vida en mí.
Vivo en ausencia,
en ausencia de ti.