He visto los Urales el Sáhara
Las noches rojizas de una Reina de Saba
He visto la Tierra, algunas tormentas
Los océanos y sus naufragios
He visto a la multitud y los silencios
Las fogatas y el sufrimiento
He visto las rosas debajo de la nieve
los grandes lobos blancos ,en las trampas caídos.
He visto caer la lluvia de verano,
a los amantes que permanecen en el andén.
Pero lo que me asombra ,sabes,
Es todo el brillo de nuestros besos
Todos los deseos y los sobresaltos
Como estrellas en tu piel
Cual la inmensidad.
He visto a los ángeles y a los demonios,
La mirada baja y los sermones,
He visto las sombras y las luces
De una mujer guerrera y sola
He visto las aguas y las rocas
Las revelaciones , los secretos.
He visto las inmensas Américas
Y todos los espejismos de África
He visto el cielo y los glaciares
Confundirse y luego romperse.
Pero lo que me asombra, sabes,
Es todo el brillo de nuestros besos
Todos los deseos y los sobresaltos
Como estrellas en tu piel
Cual la inmensidad.
He visto la infancia , la embriaguez
La vida que sonríe, la tristeza
La miseria de un mundo insensato
He visto a hombres caer,
y ante mis ojos volver a levantarse.
He visto el frío, he visto el trance
La risa de nuestro hijo bailando
He reconocido sus ojos dorados
¡Oh! ¡cuánto se parecía a ti!
He visto los lirios las orquídeas
Escondidos en nuestro jardín secreto.
Pero lo que me asombra ,sabes,
Es todo el brillo de tus besos
Todos los deseos y los sobresaltos
Como estrellas en mi piel
Cual la inmensidad.
Como la dulzura de tus besos
Todos los deseos y los sobresaltos
Como estrellas en mi piel
Cual la inmensidad.