Estoy escuchando imágenes, viendo canciones
que ningún poeta alguna vez haya pintado
Voces me llaman, directo al corazón
Es extraño y sin embargo se siente tan familiar
Dejo que la música hable sin límites
Dejo que mis sentimientos tomen el control y
se lleven mi alma, hacia el mundo
donde la belleza encuentra la oscuridad del día
Donde mi mente es como una ventana abierta
Donde los altos y sanadores vientos soplan
Las melodías me despiertan de mi sueño frívolo
permito que me tomen
(Permito que me despierten, que me seduzcan, que me tomen)
Que sea un chiste, que sea una sonrisa
Deja que sea una tontería si me hace reir por un rato
Que sea una lágrima, que sea un suspiro
Naciendo de un corazón que le habla a otro, deja que sea un llanto
Algunas calles están desoladas, hojas secas de otoño
se pasean por un viejo callejón
y en la penumbra de la noche, me he convertido en un ciego
en algún valle antiguo
dejo que hable la música y me dirija gentilmente
incitándome como lo haría un amante
dirigiéndome en todo momento, hacia un lugar
donde la belleza derrotará al día más oscuro
Donde soy una con cada grande ilusión
sin disturbios ni intrusiones
Donde dejo que las melodías anhelantes me seduzcan
permito que me usen
(Una ilusión, no disturbios, no intrusión)
Que sea un chiste, que sea una sonrisa
Deja que sea una tontería si me hace reir por un rato
Que sea una lágrima, que sea un suspiro
Naciendo de un corazón que le habla a otro, deja que sea un llanto
Que sea una lágrima, que sea un suspiro
Naciendo de un corazón que le habla a otro, deja que sea un llanto
Que sea la felicidad de cada nuevo amanecer
o el momento en que el día muere
me entrego sin reservas
Sin explicación ni preguntar el porqué
la llevo conmigo y dejo que fluya a través de mí
Sí, dejo que hable la música
dejo que hable la música