Me gustaría dar un paseo por tu mente algún día
Me gustaría, al pisar, pasar por todas las cosas que me dices
Me gustaría correr y saltar sobre tu soledad
Me gustaría reorganizar tu latitud referente a mí
Tú dices que sólo quieres paz
Y que jamás le harías daño a nadie
Ves el fin antes de que
el comienzo jamás haya comenzado
Yo perturbaría tu cómoda tranquilidad
Le prohibiría la entrada a la triste imposibilidad
de tu sonrisa
Me sentaría ahí bajo el sol de las cosas
que me gustan de ti
Cantaría mis canciones
y descubriría exactamente lo que significan para ti
Pero más que nada me gustaría que no estuvieras consciente
Y sin más me marcharía,
arrastrando tras de mí las palmas del suelo,
para que no supieras siquiera que estuve ahí