Detrás del horizonte del lugar donde vivíamos cuando éramos jóvenes
En un mundo de imanes y milagros
Nuestros pensamientos vagaban constantemente y sin fronteras
El repicar de la campana de la división ha comenzado
A lo largo del camino largo y bajando por la calzada
Todavía se reúnen allí por la corte
Allí había una banda roñosa que seguía nuestros pasos
Corriendo antes de que el tiempo nos quitara nuestros sueños
Dejando los millares de criaturas tratando de amarrarnos al suelo
Condenados a una vida consumida lentamente
El pasto era más verde
La luz era más brillante
Rodeado de amigos
Las noches de maravilla
Mirando más allá de las ascuas de puentes que brillan detrás nuestro
A un vistazo de cuán verde era en el otro lado
Pasos dados hacia adelante pero caminando dormidos hacia atrás otra vez
Arrastrados por la fuerza de alguna marea interna
A una mayor altitud, con bandera desplegada
Llegamos a las alturas vertiginosas de ese mundo soñado
Comprometido para siempre por el deseo y la ambición
Hay una hambre todavía sin satisfacer
Nuestros ojos cansados siguen vagando hacia el horizonte
Aunque por esta vía hemos ido muchísimas veces
El pasto era más verde
La luz era más brillante
El sabor era más dulce
Las noches de maravilla
Rodeado de amigos
La bruma del amanecer, brillando
El agua fluyendo
El rio sin fin
Por siempre y para siempre