(Susurro)
Acostémonos. Por favor, llévame a la cama
y apaga la luz.
Enlaza las manos,
dame un suspiro,
controla tus mentiras,
y junto a mí, acuéstate.
No escuches cuando grite,
entierra tus dudas y duérmete.
Deja que las sábanas
absorban mis lágrimas,
y ve cómo la única salida desaparece.
No me digas por qué,
despídete.
Ni para siempre, ni nunca, 1.
adiós.
Ni siempre, ni nunca,
adiós
Ni siempre, ni nunca,
adiós
adiós