[Intro]
Brillando, centelleando
unos ojos como botes hundiéndose en las aguas,
tan atrayentes, casi salto.
[Coro]
Pero no me gusta una fiebre de oro, fiebre de oro,
no me gusta anticipar mi rostro en un rubor,
no me gusta que cualquiera moriría por sentirte.
Todos te desean
todos se preguntan cómo sería amarte.
Un caminar veloz, un rápido pincel.
No me gusta la cámara lenta, una visión doble en un sonrojo rosado.
No me gusta que caerme se siente como volar hasta que se rompe el hueso.
Todos te desean,
pero no me gusta una fiebre de oro.
[Verso 1]
¿Qué se sentiría crecer para ser tan hermoso?
Con tu cabello que cae como dominós.
Me veo al margen de tus pisos de madera,
con mi camisa de los Eagles colgando de la puerta.
Durante las fiestas, te llamo la atención por dar la contaria
y este pueblo costero en el que vagamos nunca ha visto un amor tan puro,
y entonces se desvanece al gris de mi día para tomar té,
porque nunca podríamos ser.
[Coro]
Pero no me gusta una fiebre de oro, fiebre de oro,
no me gusta anticipar mi rostro en un rubor,
no me gusta que cualquiera moriría por sentirte.
Todos te desean
todos se preguntan cómo sería amarte.
Un caminar veloz, un rápido pincel.
No me gusta la cámara lenta, una visión doble en un sonrojo rosado.
No me gusta que caerme se siente como volar hasta que se rompe el hueso.
Todos te desean,
pero no me gusta una fiebre de oro.
[Verso 2]
¿Qué se sentiría crecer para ser tan hermoso?
Con tu cabello que cae como dominós.
Mi mente convierte tu vida en un folklore:
ya no me puedo atrever a soñar contigo.
Durante las fiestas, te llamo la atención por dar la contaria
y este pueblo costero en el que vagamos nunca ha visto un amor tan puro,
y entonces se desvanece al gris de mi día para tomar té,
porque nunca podríamos ser.
[Intro]
Brillando, centelleando
unos ojos como botes hundiéndose en las aguas,
tan atrayentes, casi salto.