Gloriosa celeste,
nació del barrio, del picado callejero,
de los baldíos, del campito, del potrero,
de los recreos en la escuela con pelota de papel.
Gloriosa celeste,
el cielo claro es tu bandera majestuosa,
es infinita, la bandera más grandiosa,
la que siempre está presente
juegue o no juegue Uruguay.
Con la celeste luciendo en el pecho
siempre se juega a ser campeón,
cuando juega la gloriosa celeste
la camiseta la transpira el corazón.
Un solo grito: vamo’ Uruguay!
se hace de todos, sin distinciones,
las emociones unidas se agigantan
y el Uruguay ya no cabe en la garganta.
Gloriosa celeste,
es la ilusión de un pueblo cada vez que juega,
es rebeldía y pasión cuando se entrega
algo más que el simple hecho de ganar o de perder.
Gloriosa celeste,
la historia brinda con la copa de la vida
por las victorias del pasado que están vivas,
las que motivan al presente y al celeste corazón.
Con la celeste luciendo en el pecho
siempre se juega a ser campeón,
cuando juega la gloriosa celeste
la camiseta la transpira el corazón.
Un solo grito: vamo’ Uruguay!
se hace de todos, sin distinciones,
las emociones unidas se agigantan
y el Uruguay ya no cabe en la garganta.