Cuando cambia el rojo color de cielo
por el blanco color de palomas
se oyen las campanas de los hombres
que levantan sus sonrisas de las lomas.
Después que entre pecho y pecho
haya tenido el deseo de quemar,
de matar, de vengar y de vencer.
Y cuando no se olvida que no hay
libertad regalada, sino tallada
sobre el mármol y la piedra
de monumentos llenos de flores y de tierra,
y de los héroes muertos en las guerras
se tiene que luchar y ganar,
se tiene que vivir y amar,
se tiene que reír y bailar,
se tiene que morir y crear.
Canto y llanto de la tierra,
canto y llanto de la gloria,
y entre canto y llanto de la guerra,
nuestra primera victoria.
De luces se llenó el cielo
de esta tierra insurrecta,
y entre luces se batió seguro
buscando la victoria nuestra.
Hoy se camina confiado
por los surcos de la historia,
donde pelearon los héroes
para alcanzar la victoria.