Nena, amarte para mí es lo más grande
puedo ser yo mismo y puedo cantar
Y puedo jugar a ser irresponsable
llego tarde a casa y amo tu alma,
Nunca te olvido en mis oraciones,
y nunca tengo nada malo que decir de ti.
Tú eres la imagen en la pared
tú eres la visión del recibidor
tu eres a quien siempre hablo
cuando llego del trabajo
Tú eres mi chica y ni siquiera lo sabes,
y eres la ranita divertida de mi garganta.
Mi visión se desvanece, mi oído se debilita
No estoy seguro de nada por el estado en el que estoy
Soy un peligro para mí mismo, he empezado algunas peleas,
en la fiesta del club un sábado por la noche,
pero mi chica nunca me desaprueba
ella tiene todos los reflejos envueltos con perlas
Tú eres la imagen en la pared
tú eres la visión del recibidor
tu eres a quien siempre hablo
cuando llego del trabajo
Tú eres mi chica y ni siquiera lo sabes,
vivo la vida de un poeta,
soy el bufón de la antigua corte
y tú eres la ranita divertida de mi garganta.
Tuve una charla contigo anoche
fue muy parcial pero ya está bien
te cuento en la cocina como me ha ido el día,
tú te sientas en la cama a oscuras cambiándole el sitio
al fantasma que había antes de que llegaras,
has venido a salvarme la vida otra vez.
No me atrevo a tocarte la mano,
no me atrevo a pensar en ti
en un sentido físico
y no sé cómo hueles
eres la portada de mi revista
eres mi consejo de moda, un museo viviente,
pagaría por visitarte los sábados lluviosos,
y quizá explicártelo todo, algún día.