¡Ha llegado!
La hora de deshacernos de nuestras vergüenzas
de borrar la imagen de la derrota
¡Nosotros!
Hemos lamido nuestras heridas, restaurado nuestras fuerzas
Y nuestra venganza será, oh, tan dulce.
Ellos pensaron que seguíamos caídos
Y que nunca nos levantaríamos otra vez
Se darán cuenta de que estaban mortalmente equivocados
Lo que se debe, será pagado
Nuevamente alimentaremos a los lobos
Y la venganza será nuestra
Partiremos sus cráneos y derramaremos sus entrañas
Sobre el suelo congelado
¡Sí! Nunca nos arrodillaremos otra vez
Ante ningúna deidad ni hombre
Ahora saborearán nuestro odio amargo
Lo que es debido, será pagado
Así que alcen la bandera una vez más
Y el águila será alimentada
De nuevo marchamos a la guerra
A conseguir la victoria o morir
Ellos llegaron hablando de hvitekrist1
A la fuerza, querían que nos arrodilláramos
Con sus espadas en nuestros cuellos, predicaban
Pero les haremos pagar. Les quitaremos sus vidas.
¡Así que levántense!
Levanten la bandera una vez más
En el este, el águila será alimentada
¡Marchen!
Nuevamente marchamos a la guerra
Marcharemos por la victoria o a morir
¡Dolor!
El dolor y el sufrimiento
No son sino un sueño distante que se desvanece
Nuestra desgracia, un pensamiento que se marchita
Finalmente nuestros nombres se redimirán.
1. En sueco y noruego, Hvitekrist significa "Cristo blanco"