No estés triste, sé que se acabó,
pero la vida continúa y este viejo mundo seguirá cambiando.
Sólo seamos felices porque tuvimos tiempo juntos
no hay necesidad de mirar los puentes que quemamos.
Descansa tu cabeza en mi almohada,
mantén tu cálido y tierno cuerpo cerca del mío,
escucha el susurro de las gotas de lluvia, que caen contra la ventana
y cree que me amas una vez más,
por los buenos tiempos.
Me las arreglaré, encontrarás a otro,
y estaré aquí si sientes alguna vez que me necesitas.
No digas ninguna palabra sobre el mañana o la eternidad,
habrá tiempo suficiente para la tristeza, cuando me abandones.
Descansa tu cabeza en mi almohada,
mantén tu cálido y tierno cuerpo cerca del mío,
escucha el susurro de las gotas de lluvia, que caen contra la ventana
y cree que me amas una vez más.
Por los buenos tiempos,
por los buenos tiempos.