¿Puedes escuchar Fernando?
Me recuerda tiempo atrás
estrellas y una noche allá.
En la lumbre azul, Fernando,
tarareabas tu canción
con ese suave guitarrear.
Y yo podía escuchar
esos tambores con un sordo redoblar.
Se acercaban más, Fernando.
Y el momento que pasaba
parecía eternidad.
Y sentí temor, Fernando.
Por la vida y juventud
nadie pensaba en morir.
Y no siento hoy vergüenza
al confesar que tuve ganas de llorar.
Algo había alrededor quizá
de claridad, Fernando.
Que brillaba por nosotros dos
en protección, Fernando.
No pensábamos jamás perder,
ni echar atrás.
Si tuviera que volverlo a hacer,
lo haría ya, Fernando.
Si tuviera que volverlo a hacer,
lo haría ya, Fernando.
La vejez llegó, Fernando,
y con ella una paz
que hoy logramos disfrutar.
¿Se durmió el tambor, Fernando?
Pareciera que fue ayer
que lo vivimos tú y yo.
Y en tus ojos veo aún
aquel orgullo que refleja tu valor.
Algo había alrededor quizá
de claridad, Fernando.
Que brillaba por nosotros dos,
en protección, Fernando.
No pensábamos jamás perder,
ni echar atrás.
Si tuviera que volverlo a hacer,
lo haría ya, Fernando.
Algo había alrededor quizá
de claridad, Fernando.
Que brillaba por nosotros dos
en protección, Fernando.
No pensábamos jamás perder,
ni echar atrás.
Si tuviera que volverlo a hacer,
lo haría ya, Fernando.
Y si tuviera que volverlo a hacer,
lo haría ya, Fernando.
Si tuviera que volverlo a hacer
lo haría ya, Fernando.
Y si tuviera que volverlo a hacer…