Lo que sea que he temido ha cobrado vida,
y aquello con lo que he luchado se ha vuelto mi vida,
justo cuando cada día parecía saludarme con una sonrisa,
las manchas solares se han desvanecido.
Ahora cumplo una condena,
ahora cumplo una condena.
Porque he caído en días negros,
he caído en días negros.
A quien sea que he curado, ahora lo enfermé,
y a quien sea que he acunado, luego lo solté,
soy un faro, o así dicen,
pero eso no lo puedo ver por la noche.
Cuando hago las cosas bien, sólo finjo,
cuando hago las cosas bien.
Porque he caído en días negros,
he caído en días negros.
¿Cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste?
¿cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste? ha.
Así que lo que querías ver como bueno,
te ha cegado,
y lo que querías que fuera tuyo,
se ha vuelto mío.
Así que no encierres algo,
que querías ver volar,
las manos están para estrecharlas,
no, nada de atarlas, no nada de atarlas.
Claro que un cambio no me viene mal,
claro que un cambio no me viene mal,
sí, claro que no, un cambio no me viene mal,
seguro que un cambio no me viene mal.
Porque he caído en días negros,
he caído en días negros.
¿Cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste?
¿cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste?
¿Cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste?
¿cómo habría sabido
que mi destino podía ser éste?
Por supuesto que un cambio no me viene mal.