Farabute ilusionado
por la mersa de magnates
que enfarolan su presencia
con suntuosa presunción,
no manyás pobre franela,
que aquél que nació en un catre
a vivir modestamente
la suerte lo condenó.
Sos la escoria remanyada
que esgunfiás con tu presencia
de chitrulo sin carpeta,
residuo del arrabal,
tus hazañas de malevo,
al cuaderno de la ausencia
con el lápiz del recuerdo
te las voy a enumerar.
Clandestino de carreras,
a ratitos, quinielero,
así te hacés las chirolas
con que a veces te empilchás.
En tu casa todo el año
a la hora del puchero,
te enyantás las prepotencias,
lo que nunca te ganás.
Deschavate farabute,
no naciste pa' cafishio
al laburo dedicate,
que allí está tu salvación
recordá la viejecita...
que hace un mes en el hospicio
al morir: “tus hermanitas”,
suplicando señaló.
Ya que en su triste existencia,
como un trapo la has tratado
ni un halago, tan siquiera,
le supiste demostrar,
hoy tenés frente a la vida
la misión que te ha encargado
que la santa desde el cielo
te sabrá recompensar.