Llegaste a mí apenas sin avisar
vestida de esa falsa seguridad.
Trajiste contigo la tempestad
devastando todo.
Y lastimas mi alma
sin dejar sentimiento en pie.
Que lejanos quedan ya
esos días en los que perdíamos
la noción del tiempo
queriendo podíamos alcanzar
cielos aún sin divisar.
¿Dónde acaba el deseo
y dónde empieza la realidad?
Pues al alba irrumpes mi vida
entonces todo vuelve a empezar
pues no puedo escapar de ésta oscuridad.