En algún lugar de un gran país
olvidaron construir
un hogar donde no queme el sol
y al nacer no haya que morir.
Y en las sombras,
mueren genios sin saber
de su magia
concedida sin pedirlo
mucho tiempo antes de nacer.
No hay camino que llegue hasta aquí
y luego pretenda salir.
Con el fuego del atardecer
arde la hierba.
En algún lugar de un gran país
olvidaron construir
un hogar donde no queme el sol
y al nacer no haya que morir.
Un silbido cruza el pueblo
y se ve un jinete
que se marcha con el viento
mientras grita que no va a volver.
Y la tierra aquí es de otro color,
el polvo no te deja ver.
Los hombres ya no saben si lo son,
pero lo quieren creer.
Las madres que ya no saben llorar
ven a sus hijos partir.
La tristeza aquí no tiene lugar,
cuando lo triste es vivir.