Tengo un minuto solamente, un minuto, sólo un minutito
nada más que un solo minutito
sesenta segundos es todo el tiempo que tengo
no me han dado más, para cantar este pequeño vals
Sé que es difícil, pero intentaré
Quisiera irme, pero antes tomaré el minuto
y juro que lo llenaré con las notitas que escribió Chopin
No hay más remedio, lo tendré que hacer
Quisiera hacerlo sin equivocarme
pero es tan difícil sin equivocarse
respirar a tiempo, no errar una nota
y seguir, ji-ji-ji, sonriendo,
Para que ustedes queden satisfechos
y que no reclamen en boletería
devolviendo las entradas
y diciendo que esto es una porquería
Sé que hay muchas cantantes
que dividen este valsecito en dos o tres partes
pero yo lo hago de un tirón
como lo soñó el autor
Y ahora debo concentrarme
respirar bien hondo
abrir bien la boca
Lo he pasado sin dificultad
ya he llegado a la mitad
Esta parte es más serena
¿Será el puente o será el tema?
Me pregunto dónde estoy
La verdad que no tengo la menor idea
Ya me falta menos de treinta segundos
menos de treinta segundos, ya me falta menos
ya me falta menos, casi veintisiete
para completar este pequeño vals
Cada corchea es una tortura
Si no respiro me voy a quedar dura sobre mis pulmones
En cuantro termine con esta payasada
me las tomo, me las tomo, sí señores
a comerme un buen plato de raviolis
Y ahora despacito, que falta poquito
sólo diez compases y un acelerando
¡Ah! si nos apuramos tengo miedo de no poder terminarlo
Yo me pregunto: y Chopin, ese tuberculoso
¿en qué pensaría cuando lo escribía?
¡Ay! ¡No lo puedo creer!
¡Llegamos al final de este maldito vals!