Hay dos estrellas en el cielo
que iluminan la más negra oscuridad
y hablan solas y brillantes
de historias hechas realidad.
Y miran otras galaxias
que llevan nombres más extraños,
y voltean sus rostros
hacia nubes lejanas.
La estrellas más grande es más bella
porque lleva el nombre de una flore
y brilla con una luz distinta
más grande y más fuerte que el sol.
Y en medio de la constelación
la más pequeña se ha quedado sola
y no sabe cómo darle su amor
a la estrella más grande que ahora
ya no escucha sus promesas
que tiempo atrás eran oscuras ilusiones.
Ahora en cambio son tan sinceras
que brillan con mil colores.