Se siente un grito extraño. Dirijo la mirada hacia allá dónde viene y veo una vaca pastando y a su lado una mujer descabellada, con los brazos extendidos y pies descalzos que baila sin compás.
Pasa un chico en mi lado y le pregunto : “¡Chico ! ¿ Sabes quien es esta mujer ? y él avergonzado, me contesta : La Revolución.
Conocí a una chica sin pueblo, sin ciudad.
Los pies negros iban descalzos, llevaba los cabellos sueltos.
Sus ojos sombríos explicaban bellas historias del pasado pero cerrándolos amagaba lo que estaba pasando desde ahora
Y alzando las manos en el aire y con movimientos de cabeza.
Su cintura dibujaba libertades sin fines
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí mujer de la calle
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí sonria y baile
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí mujer de la calle
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí y baile !
Y ahora llevas sal en el bolsillo para recordarla cuando se hace tarde
Sal, calor del mar salado que si tengo suerte volveré a lamer
Y alzando las manos en el aire grita al cielo para cantar,
la canción que nunca se acaba : que dice lai lai lailai lailai lailai
lai lai lailai lailai lailai
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí mujer de la calle
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí sonria y baile
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí mujer de la calle
Lailai lailai lailai lailai lai lai
Ven aquí y baile !