La guitarra hawaiana sonaba cuando la conocí,
y sonaba la noche que la perdí.
Sí, la condujiste a otro
con tu dulce encanto hawaiano.
Sé que lo sientes, pero ya es muy tarde,
y sé que no intentaste hacer mal
pero el vals que estabas tocando
la puso en otros brazos.
Así que llora, guitarra, sigue llorando. 1.
Lloras porque sabes que ella se fue.
Se fue con otro y yo estoy solo
Así que llora, guitarra, sigue llorando.
Así que llora, guitarra, sigue llorando.
Lloras porque sabes que ella se fue.
Se fue con otro y yo estoy solo,
así que llora, guitarra, sigue llorando.