Mauro se levantó aquel martes con cara de punto y aparte.
Ya estuvo bueno, está decidido pues yo no nací para sufrido.
Al escuchar a un gurú muy sabio de algunas 96 vidas y sin pensarlo 20 horas mas tarde, Mauro aterrizó en la India.
Y subió, la montaña mas alta subió.
Y cuando el viejo la cara le vio lo interrumpió antes de que hablara y le dijo
"Para el cafe esta la azúcar, para el pan la mantequilla, para crecer es la vida.
Para amarrarte, la culpa, para protegerte está el miedo.
Y para equivocarte, hazme caso, para el ateo está su mente.
Para el cristiano, la cruz.
Para el budistas la flor de loto.
Pero en todos mis años, hijo yo nunca he encontrando paz para un corazón roto."
Le entro a un oído y afuera el otro, se esfumaron las sabias palabras.
Que sabe un monje al fin y al cabo de un mal de amores como el de Mauro.
Muy convencido llamó a un amigo, de todos el más callejero.
Seguramente una noche de aquellas sería la mejor receta.
Y bebió, todo lo que al frente encontró Y en pleno entusiasmo de alcohol,
A ese amigazo le entró lo de poeta.
Y le dijo
Para enamorarse está París.
Para olvidarse, Las Vegas, Para arrepentirse, el vaticano.
Para abrigarse, el invierno. Para soñar, el otoño.
Y para encuerarse, el verano, Para engordar el matrimonio,
Para enloquecer el divorcio, Y para rebajar, la venganza.
Pero créeme mi socio.
No se puede hacer negocio, Con un corazón roto.
Hay que llorar, mil lágrimas hay que llorar.
Sólo tenemos la opción de escoger,Si es ahora o después.
Va a doler, mil noches te va a doler.
No hay amnistía
Ni gimnasia intelectual
Que te pueda liberar.
Dímelo Mauro
"He hablado con sabios tan sabios que con sólo una palabra dicen 50 oraciones.
He estudiado muchos libros, he destapado mil botellas buscando llegar al fondo.
He consultado al espejo.
He escuchado a mil pendejos. Con cara de inteligentes. Para concluir que no hay remedio ni cercano ni remoto, para un corazón roto.
Dime
Que alguien me diga que se hace para un corazón roto.
Dígame si hay un jarabe para un corazón roto.[x2]
Una de esas pastillitas para un corazón roto.
Dígame si hay un despojo para un corazón roto.
Dígame dígame dígame oh dígame