Deja de esconderte,
que la sonrisa hable más que tú.
No somos eternos, somos como una ironía
al tiempo de un pasado que escribe este presente.
Superar palabras mientras esta lluvia
nos llena los vasos, tú bebes el mío.
Ahora somos como el rastro de un breve cometa,
de un camino de Tierra hecho eterno.
Nunca dejaremos de perder la cabeza
por la vida que nos espera,
por las noches de noche serena,
para que hoy se nos haga tarde.
Siempre buscaremos el lugar más alto
para mirar lejos de Tierra,
para colgarnos de una estrella,
i para que estemos como en casa.
Déjame explicarte
que a duras penas el aire nos llena la nariz,
i quien sabe donde nos sentaremos en las ramas para morir de sueño
para entender cuando juntos nace el mundo.
I recibiremos interferencias
de un inhóspito cielo rojizo,
desde tierra, mar i aire
las imágenes que nos captura la mente.
Nunca dejaremos de perder la cabeza
por la vida que nos espera,
por las noches de noche serena,
para que hoy se nos haga tarde.
Siempre buscaremos el lugar más alto
para mirar lejos de Tierra,
para colgarnos de una estrella,
i para que estemos como en casa.