Baja la niebla y envuelve la ciudad
nunca hay respuesta si pregunto al cielo
me miro adentro y soy un cauce seco
desde este café bajo a los infiernos.
Llamándote
igual que siempre, llamándote.
Bajo la lluvia agonizaba un perro
se escucha al mundo removerse inquieto
lo llena todo el peso del recuerdo
volando bajo casi al ras del suelo.
Pájaros negros se meten por el sueño
un cigarrillo arde entre mis dedos
la noche luego se cala su sombrero
sale a la calle y es un gato en celo.