Tu entraste aunque no te abrí la puerta
y me dejé llevar.
Tu borraste el mecanismo de defensa,
que nadie logró de cifrar.
No sé en qué me has convertido,
me di con la pared.
Mi infierno es tu paraíso, me duele hacerte bien.
Y fue un remolino, que me ahogó de tanto amor.
Y fue un laberinto, que me llevo a tu dirección.
Eres un milagro insuficiente
y es que cada día quiero más.
Somos dos adictos reincidentes sin final.
Yo confundo mariposas con alertas.
Yo juego a perder o a ganar.
Voy flotando a diez mil metros de la tierra,
soy un caos sentimental.
No se en quien me has convertido,
me de con la pared.
Mi infierno es tu paraíso, me duele hacerte bien.
Y fue un remolino, que me ahogó de tanto amor.
Y fue un laberinto, que me llevo a tu dirección.
Eres un milagro insuficiente
y es que cada día quiero más.
Somos dos adictos reincidentes...
No sé por qué no lo puedo evitar,
todo este caos no me sienta mal.
Un remolino, que me ahogó de tanto amor...
Y fue un laberinto, que me llevo a tu dirección...