Estoy encontrando mi camino de vuelta a mi cordura otra vez
aunque no sé en realidad lo que
voy a hacer cuando llegue ahí.
Y tomar un respiro y aferrarme bien.
Girar una vez más
y con gracia caer de vuelta en los brazos de la gracia.
Pues estoy absorto ante cada palabra que dices
e incluso si no quieres hablar esta noche,
está bien, por mí está bien.
Pues no quiero nada más que sentarme
afuera de la puerta del cielo y escucharte respirar.
Es donde quiero estar.
Estoy viendo más allá de las sombras
de mi mente, en la verdad y
estoy intentando identificar
las voces en mi cabeza;
Dios, ¿cuál eres tú?
Déjame sentir una vez más
lo que se siente sentir
y quitarme estas callosidades de encima
una vez más.
Pues estoy absorto ante cada palabra que dices
e incluso si no quieres hablar esta noche,
está bien, por mí está bien.
Pues no quiero nada más que sentarme
afuera de tu puerta y escucharte respirar.
Es donde quiero estar.
No quiero nada de ti.
Apuesto que estás cansada de que espere
que mis amarres se caigan
de tu mesa hacia el suelo.
Pues ahora sólo quiero estar aquí.
Pues estoy absorto ante cada palabra que dices
e incluso si no quieres hablar esta noche,
está bien, por mí está bien.
Pues no quiero nada más que sentarme
afuera de la puerta del cielo y escucharte respirar.
Es donde quiero estar, sí.
Pues estoy absorto ante cada palabra que dices
e incluso si no quieres hablar esta noche,
está bien, por mí está bien.
Pues no quiero nada más que sentarme
afuera de la puerta del cielo y escucharte respirar.
Es donde quiero estar.