Tranco, tranco por los
caminos de nadie.
Campo, flor
allá en los cañaverales.
Ranchos, ranchos
rodeo de alga lobales
y una voz cantando
del rancho sale.
El bailecito del pobre
es como rueca gastada,
de tanto hilar ilusiones
ya lo conforman con nada.
Pobre soy de tanto llorar ausencias
¿dónde voy si ya no tengo querencia?
si me voy de mi Tucumán querido,
sabrás que nunca te olvido