¿A causa de montañas? ¿De mares?
¿Culpa de los números? No sé...
Por muchas cosas singulares
No te encontré, no te encontré...
Y te esperaba, te llamaba
Entre los caminos me perdí.
¿Fue nube negra? ¿Marea enojada?
Y era por ti, ¡era por ti!
Las manos que traigo, las manos son estas:
Ellas solas te dirán
Si viene del entierro o de fiestas
Mi corazón, ¡mi corazón!
Tal como soy, no te invito
Ir a esperar a donde yo vaya
Todo lo que tengo es haber sufrido
Por mi sueño alto y perdido
Y el encantamiento arrepentido
De mi amor, ¡de mi amor!