En la bruma leve de las pasiones que vienen desde adentro
tú vienes llegando para jugar en mi patio
en tu caballo, a pelo, cabello en el viento
y el sol blanquea nuestras ropas en el tendero
La voz de un ángel susurró en mi oído
ya no lo dudo, ya escucho las señales tuyas
que tú vendrías una mañana de domingo
y yo te anuncio en las campanas de las catedrales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales
La voz de un ángel susurró en mi oído
ya no lo dudo, ya escucho las señales tuyas
que tú vendrías una mañana de domingo
y yo te anuncio en las campanas de las catedrales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales
tú vienes, tú vienes, ya escucho tus señales