En una de las casas, en donde hay café y cigarrillos,
y los que vienen, para descubrir que no estamos, nos lo disculpan.
Menudo verano caluroso este año.
Allí arriba, el tejado incandescente se derrite silenciosamente.
Las ventanas están abiertas, el ratón duerme.
Va a haber una tormenta, los rayos esperan la señal del contrabandista.
En la profundidad, tu Altavista romperá la red al atravesarla.
Y tocarás, en código Morse, una sinfonía alucinante en el teclado.
Entonces, el sol saliente se detendrá para siempre en este julio caluroso.
Altavista…
Altavista…
Altavista…